Sensibilizamos a las familias participantes en los diferentes proyectos –muy especialmente, a la niñez y jóvenes- y a las comunidades, para que sean conscientes de la importancia de cuidar el medio ambiente, apostándole a que cambien sus prácticas y se conviertan en Guardianes de los recursos naturales.
Cada año, plantamos más de 4,000 árboles –frutales, maderables y ornamentales-, privilegiando aquellas especies nativas y en vía de extinción, lo que ha contribuido a la reforestación de las comunidades donde tenemos presencia, en beneficio del medio ambiente y de la salud de las mismas familias, quienes se comprometen a cuidar y brindar mantenimiento a dichos árboles, y luego se benefician con la sombra y frutos que éstos les proveen.
Apoya la educación de un niño o niña o a su familia, para que puedan salir de la pobreza.
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